👗 Cómo encontrar tu estilo sin sentirte disfrazada

Hay algo que no siempre se dice cuando hablamos de estilo:
👗 Sentirse bien con lo que llevas no siempre pasa por “verse bien”.

Muchas veces puedes estar bien vestida, incluso ajustarte a las normas de “lo que favorece”, y aun así sentir que no estás siendo tú.
Es como si algo no encajara. Como si el outfit hablara un idioma que no es el tuyo.
Y eso, aunque nadie más lo note, tú sí lo sientes.

💭 Esa incomodidad silenciosa,
💭 ese gesto de ajuste constante,
💭 esa necesidad de volver a casa a quitarte lo que llevas…
…no es superficial. Es una señal.

🪞La diferencia entre vestirte y reconocerte

Vestirte puede ser automático. Pero reconocerte con lo que llevas puesto requiere presencia.
Y muchas veces lo que está fallando no es la ropa, sino el proceso que hay detrás de esa elección.

A veces te vistes desde la comparación.
Otras desde la norma.
Otras desde el “esto es lo que toca”.

Y así se va perdiendo tu esencia en tu propia imagen.

👉 El problema no es no tener estilo.
El problema es que tal vez te has alejado del tuyo.

🎯 Claves que pueden ayudarte a reencontrarte:

• Observa en qué momentos te sientes disfrazada. ¿Qué tienen en común esos looks? ¿Qué emociones los acompañan?

• Piensa en cómo quieres sentirte más que en cómo quieres verte. A veces, el cambio no está en el tipo de prenda, sino en la intención con la que la eliges.

• Pregúntate: ¿estoy eligiendo esta ropa para expresarme o para agradar?

📝 Estos no son “pasos” para definir tu estilo. Son señales que pueden ayudarte a empezar a afinar tu mirada, a detectar qué está sumando y qué está desconectando tu imagen de tu identidad.

Porque cuando empiezas a ver tu estilo como una forma de expresarte, en lugar de disfrazarte, cambia toda la experiencia.

💛 Encontrar tu estilo no debería sentirse como una obligación

Debería sentirse como volver a casa. Como reconocerte después de mucho tiempo.
Y no es algo que pase de un día para otro. Es un proceso de escucha, de prueba, de honestidad contigo misma.

Por eso, si sientes que ahora mismo no estás vestida desde ti, no es porque lo estés haciendo mal.
Es porque quizás ha llegado el momento de hacerlo diferente.

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Y acompáñate en ese proceso de volver a mirarte al espejo y decir:
"Así soy yo. Y esta imagen por fin habla mi idioma."

Con cariño,

Yohana